Miles de personas marcharon este miércoles en Argentina para adherirse al paro nacional convocado por las principales centrales sindicales en repudio a las políticas implementadas por el presidente Javier Milei.
“La patria no se vende”, “No al ajuste” y “No a la reforma laboral”, fueron algunos de los principales lemas de la manifestación que colmó la Plaza del Congreso, en la ciudad de Buenos Aires, y que marcó un hito, ya que es la primera huelga general de la era Milei, quien asumió el pasado 10 de diciembre.
Se trata también de la primera movilización de este tipo que se realiza con tanta premura en la historia de este país, ya que el presidente solo lleva 45 días de gestión.
La protesta se debe a que, en tan breve lapso, Milei ha presentado iniciativas que transforman radicalmente el país sudamericano y afectan a múltiples sectores. Por tanto, los argentinos salieron a las calles a reclamar sus derechos.
Los ejes del Gobierno libertario son el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), que en algunos capítulos como la reforma laboral fue frenado por la justicia; y la ‘ley ómnibus’, que esta madrugada obtuvo un ajustado dictamen favorable para el oficialismo pero que enfrentará su prueba de fuego el jueves o viernes, cuando se discuta en sesión plenaria en la Cámara de Diputados.
La tensión judicial y legislativa provocada por estas medidas se incentivó con el anuncio del paro nacional que fue convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT), la central sindical más grande de Argentina, y al que adhirieron la Central de Trabajadores de Argentina (CTA), y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
Apoyo y críticas
A la masiva marcha en Buenos Aires se sumaron colectivos de derechos humanos como las Abuelas de Plaza de Mayo, trabajadores independientes, feministas, universitarios, docentes, microempresarios, productores, disidencias sexuales, discapacitados, escritores, artistas, deportistas y todo tipo organizaciones sociales.
Las protestas se replicaron en las principales ciudades del país como Rosario, Córdoba, Ushuaia, Misiones, Santiago del Estero, Chubut, Mar del Plata, Bahía Blanca, Tucumán, Santa Fe, Río Negro, Bariloche, Jujuy y Mendoza.
Además, hubo respaldo internacional, ya que centrales sindicales y organizaciones de argentinos que viven en el exterior se manifestaron en México, Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay, Perú, España, Francia, Bélgica, Italia, Portugal, Alemania y Holanda.
En el plano político, una de las participaciones más significativas en la movilización fue la del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien se perfila como uno de los líderes más importantes del peronismo durante el actual Gobierno.
La huelga, que comenzó al mediodía y terminará a la medianoche, fue minimizada desde temprano por ministros de Milei que colmaron las redes sociales de insultos hacia los manifestantes.
Además, Bullrich publicó una serie de videos para demostrar, según su visión, que el paro no había tenido mayor adhesión. Las imágenes fueron reposteadas por Milei, quien siguió la jornada desde la residencia oficial de Olivos.
(Información de RT Noticias).