La Mtra. Guadalupe Chávez Ortiz, directora del Departamento de Ciencias de la Salud de la Universidad Iberoamericana Puebla en compañía del Mtro. Aristarco Alberto Cortés, director del Instituto de Diseño e Innovación Tecnológica (IDIT); la Mtra. Leticia López Posada, coordinadora de la Licenciatura de Nutrición y Ciencias de los Alimentos; y la Mtra. Daniela Ramos Jiménez, representante de la Academia de esta especialidad inauguró el V Foro de Alimentos, espacio que muestra el trabajo de los alumnos de este programa académico.
Durante su discurso, la Mtra. Chávez Ortiz destacó que el objetivo de este espacio es promover la Ciencia de los Alimentos como un área de oportunidad para que las y los estudiantes de esta disciplina desarrollen y fabriquen productos dirigidos a poblaciones vulnerables, esto como parte de su responsabilidad profesional.
Sobre este trabajo coordinado, la Directora de Ciencias de la Salud de la IBERO Puebla expresó su felicitación a los docentes que acompañaron de cerca los 40 trabajos desarrollados por más de 100 estudiantes. Y agradeció a productores y empresas que confiaron el desarrollo de estos proyectos a alumnos de la Nutrición.
“La confianza depositada es sin duda un compromiso, en estos tiempos cuando la humanidad vive con miedo sabemos que confiar en otros es una señal esperanzadora de que aún podemos construir espacios de crecimiento mutuo”, afirmó la Mtra. Guadalupe Chávez.
Finalmente, la titular de este Departamento señaló a los estudiantes que todo su esfuerzo realizado en estos trabajos valió la pena, porque con dichas aportaciones no solo han crecido profesionalmente, sino que han sido capaces de reflexionar que desde la Nutrición se puede aportar a revertir la disparidad social y económica que prevalece en México.
Posteriormente, se dio la intervención de las personalidades que estuvieron en el panel, La Ciencia de los Alimentos, para el Desarrollo Social: Mtro. Juan Manuel Martínez Louvier, coordinador del Laboratorio de Innovación Económica y Social (LAINES) del IDIT, el Mtro. José Francisco Meneses Carrillo asesor de la incubadora del IDIT del proyecto “Yo Compro Poblano”, María Antonieta Hereda de la empresa “Amvixir Licores Digestivos”, la Dra. Marta Martínez, académica del área de Ciencias de los Alimentos y, Andrea Ochoa alumna de la Licenciatura de Nutrición y Ciencia de los Alimentos.
El Mtro. Juan Manuel Martínez Louvier mencionó el trabajo que se realiza en el LAINES, el cual concientizar a los alumnos a través del desarrollo de proyectos que apoyen a pueblos vulnerables o la creación de productos para las empresas. “Debemos corresponder con una generación de trabajo socialmente responsable”.
Como punto a destacar, el Coordinador del LAINES afirmó que, la peor toxina que el cuerpo puede ingerir es el capitalismo, “si dejamos en manos de estructuras empresariales nuestra vida, ésta lo transforma en dinero y el dinero no se come”. Bajo este escenario, el especialista en economía social, señaló que existe una manera de generar producción, la cual es el desarrollo de empresas donde la inversión económica es mínima pues se prioriza la creación de una economía social que impulse la transformación económica a través de transformaciones sociales.
Por su parte, el Mtro. José Francisco Meneses Carrillo, puntualizó que el gran reto que enfrentan los jóvenes universitarios es el conocer a las personas y saber qué es lo que necesitan, lo que implica ser creativos e innovadores en alimentos nutritivos, atractivos y disponibles. “Desarrollen empresas de alimentos que no sólo se enfoquen en un producto, sino también en la posibilidad de diversificar su mercado y trabajo con el diseño de nuevos productos”.
María Teresa Perea agradeció el hecho de que existan diversas áreas de oportunidad para crecer como empresa, sobre todo, el apoyo brindado por los estudiantes y académicos de la IBERO Puebla al orientarlos y acompañarlos en los procesos de creación e innovación.
El micro empresario del mole casero Rosita, Ing. Carlos Rojas, enfatizó en la carencia que actualmente tiene los jóvenes, la cual consiste en conocer cuáles son las necesidades diarias de una población, así como estudiar las fortalezas y debilidades; “día con día van cambiando las necesidades, pero las tradiciones permanecen y debemos saber cómo vincular y armonizar ambos aspectos, cómo hacerlos atractivos para lograr su venta”.
Asimismo, la Dra. Marta Martínez reconoció la confianza y el aprendizaje que los maestros permiten. “Lo más importante es el proceso de aprender, más que un estudio teórico o práctico, se debe aplicar el trabajo en campo para beneficio del otro”.
Finalmente, Andrea Ayerdi Ochoa compartió su experiencia como estudiante, destacando que a veces suelen enfocarse en la parte clínica, cuando en realidad hay mucho campo que hacer afuera de las aulas.
“Este semestre, estamos trabajando en el diseño de medidas correctivas y protocolos para la vida útil, de igual forma, estamos apoyando en la elaboración de etiquetas nutrimentales, lo cual es muy importante para que el consumidor pueda decidir y controlar que ingerir”, señaló Andrea Ochoa.