Washington.- El número de soldados de la Guardia Nacional que Estados Unidos enviará a la frontera con México podría ser de dos a cuatro mil, según manifestó el presidente norteamericano, Donald Trump.
Ante la pregunta de cuántos guardias nacionales quiere ver en los límites con la nación latinoamericana, donde quiere edificar un polémico muro, el gobernante republicano respondió que están valorando varias combinaciones dentro de esas cifras.
Estamos buscando entre dos mil y cuatro mil, y probablemente los conservemos, o una gran parte de ellos, hasta que lleguemos al muro, agregó el mandatario, quien al anunciar hace dos días su idea de enviar militares a la frontera, manifestó que permanecerían allá hasta contar con la barrera.
A través de un memorando firmado anoche el jefe de Estado orientó al secretario de Defensa asistir al de Seguridad Nacional en asegurar la frontera sur y tomar medidas adicionales ‘para detener el flujo de drogas mortales y otros contrabandos, miembros de pandillas, delincuentes y extranjeros ilegales a este país’.
Al mismo tiempo, pidió a ambos titulares y al fiscal general determinar qué otros recursos y acciones se necesitan, y elaborar con esas recomendaciones un plan de acción a ser presentado en un plazo de 30 días.
‘No podemos permitir que la gente ingrese ilegalmente a nuestro país, desaparezca y nunca comparezca ante el tribunal’, había dicho Trump el martes, luego de lanzar el fin de semana una fuerte cruzada en las redes sociales contra el arribo de indocumentados.
Medios locales advierten que el presidente enfrenta una gran presión de su base para que asegure una victoria en la materia, luego de que el Congreso dejara fuera de la recién aprobada legislación de gastos una solicitud de 25 mil millones de dólares para construir el muro fronterizo.
En su renovada campaña sobre este asunto, Trump exigió en los últimos días un cambio en las reglas del Senado para eliminar el filibusterismo y aprobar leyes con una mayoría simple de 51 votos -de los 100 que posee la Cámara Alta-, en lugar de los 60 necesarios actualmente.
Tal modificación permitiría a los republicanos, dueños precisamente de 51 asientos en ese órgano, avalar normas migratorias sin precisar apoyo de los demócratas, a quienes Trump culpa de que Estados Unidos cuente con reglas ‘ridículas’ en la materia.
La secretaria de Defensa, Kirstjen Nielsen, indicó ayer que la administración redactó una legislación para pedirles nuevamente a los miembros del Capitolio que otorguen la autorización legal y los recursos para enfrentar esta ‘crisis en nuestras fronteras’.