Son 22 las historias protagonizadas por músicos que han sufrido de desamor, que han vivido la soledad y la frustración, y que integran Ensayo de orquesta, libro de cuentos escrito por Laura Margarita Hernández Baeza (Campeche, 1988), galardonada con el Premio Nacional de Cuento Breve Julio Torri 2017.
En entrevista, la egresada de la licenciatura en Literatura por la Universidad Autónoma de Campeche compartió que de lo que se relata en el volumen publicado por el Fondo Editorial Tierra Adentro, mucho es realidad.
“Mis amigos músicos piensan que me puse a recolectar todas las experiencias terribles y chistosas que pasamos durante mucho tiempo, en realidad gran parte de lo que aparece en las historias son parte de mi vida y gente cercana”, compartió.
La también autora de Al fondo se ve el mar, explicó que parte de su proceso creativo consistió en abordar ciertos temas y darles forma, por lo que en Ensayo de orquesta se plantea las relaciones de pareja, las complicaciones económicas, la locura, el retiro, y las consecuencias al tomar malas decisiones.
“La gente dedicada a la música está acostumbrada a todo tipo de frustración, creo que por eso quise escribir sobre lo que el músico tiene que hacer para sobrevivir a partir de su arte. Planteo que hay cosas peores en la vida a que te rechacen una publicación.
“Los músicos, así como las personas dedicadas al arte, ya sean bailarines, cineastas o actores de teatro, tienen vida y momentos tormentosos. Un músico no sólo se pone un esmoquin y toca, en su vida no todo es bello y delicado, hay situaciones y momentos complicados detrás de las personas que ejecutan un instrumento”, aseguró la profesora de violín.
La escritora con 30 años de edad compartió que siempre ha estado en dos ambientes: la literatura, de la que tiene estudios, y la música, disciplina que empezó a practicar al empezar a tocar el violín a los ocho años de edad, por influencia de su abuelo quien dirigió una orquesta.
“Tocar el violín ha sido una actividad que no he abandonado, pero también desde niña me interesó la lectura y la escritura. Yo no jugaba a ser enfermera o maestra, jugaba a que tenía una biblioteca. Siempre me he dedicado a la literatura y la música ha sido la otra actividad que me ha acompañado”.
Laura Baeza, quien realizó un diplomado en Comunicación, Periodismo y Humanidades en la Universidad Autónoma de Barcelona, compartió que desde hace varios años un amigo le decía que tenía que escribir respecto a la música.
“Había escrito otros cuentos que tienen que ver con los instrumentos musicales, pero hacerlo sobre los músicos no encontraba la manera, el modo ni el tono. No podía hacer la separación de disciplinas, hasta que me animé, también influenciada por la convocatoria de Cuento Breve Julio Torri, que me sirvió para darle claridad al proyecto”.
La publicación se estructuró en cinco secciones: Se queda la cuerda. Los demás, nos vemos mañana (concertino, violín primero, violín segundo, viola, chelo y contrabajo); Un La para las maderas (piccolo, flauta, oboe, clarinete y fagot); Allá atrás, poco piu meno (corno, trompeta, trombón, tuba); Percusiones, hace falta un seccional (timbales y tambor indio); y Solistas, llegan tarde (arpa, piano, cantantes, críticos y batuta).
“Considero el lector se puede identificar con las historias, esa fue un poco mi intención al escribirlas. El dedicarme a la música me hizo una persona disciplinada y a esperar resultados sobre algo que se hizo, y si éste es contrario a lo que se esperaba provoca una sacudida.
“Yo quería que se sintiera esa sacudida del coraje y la frustración, las cosas pueden ir muy bonito si eres quien toca el piccolo en una sinfónica, pero te puede estar llevando el diablo porque te dejó tu pareja. En los cuentos quise conjuntar que puede haber frustraciones de muchos niveles, en una sola persona en un mismo momento”.
Sobre el género del cuento, Laura Baeza destaca su característica de la contundencia. “Me agrada el mostrar algo bueno en pocas páginas, que provoque deslumbramiento y que te quedes pensando sobre ello en un buen rato.
“En un libro de cuentos caben muchas posibilidades, a veces la lectura de una novela es una, tal vez dos, dependiendo de lo que el lector esté buscando en ella, pero el cuento da muchas posibilidades, tiene un tratamiento estético diferente que nos permite ver dos o tres lecturas dentro de la misma historia. Espero que en mis cuentos el lector encuentre algo interesante”.
Finalmente, Laura Baeza comparte que obtener el Premio Nacional de Cuento Breve Julio Torri fue una sorpresa. “Sabía de su importancia, pero no me imaginaba que tanto iba a repercutir en lo que estoy haciendo ahora. Ganarlo es algo que había anhelado mucho, y sube el listón para que yo siga escribiendo cosas mejores que las que he escrito”, puntualizó.
Ensayo de orquesta, de Laura Baeza, puede adquirirse en la Red de Librerías Educal.